Comienzo pidiendo perdón una vez más (si, si se que ya parece cuento
repetido) y es que me ha sido imposible escribir más y tomar fotos ya
que han sido unos días ultra ajetreados. Como les contaba la semana
pasada nos cambiaremos de casa y aparte de la mudanza, que no es mucha
ya que no tenemos casi nada, tienes que hacer un millón de tramites. Que
el contrato con abogado, que ir a cambiar la cuenta de la luz y agua,
entremedio las clases y mi Eduardo con más pega que nunca. Además darse
un ratito para celebrar Fiestas Patrias y salir a tomar aire aunque sea
un rato, pero con tan mala suerte que el día viernes fuimos por la noche
a pasear a San Juan y a la vuelta el maldito auto no partió, se
descargó la batería y no partió nunca más. Cuento corto estuvimos hasta
la 1 de la mañana tratando de buscar ayuda, la policía bien poco nos
pescó y nos tuvimos que devolver en taxi y dejar el auto botado. Por lo
menos mientras esperábamos la ayuda que nunca llegó vimos una
persecución policial (pero nunca vimos al perseguido), hablamos con un
borracho e hicimos buena onda y conversamos un montón con una gringa que
recién se había mudado. Así que no nos aburrimos para nada.
Ahora hago una pausa mientras espero por teléfono el servicio de
internet para que me lo cambien de domicilio, miren que puedo no tener
comida pero sin internet me muero jajaja.
Para todas y todos los que preguntaron por Atia les cuento que está de
lo más bien. Ya ha ido a jugar con sus perros amigos y hoy le sacaron
los puntos. Como será de lo bien que se siente que anoche sacó tierra de
un macetero y hoy rompió una punta del colchón, así de malula anda.
Pero lo importante es que está súper bien de salud.
Y ahora nos vamos con las miseras fotos que pude sacar.
Empanadas de horno hechas en casa por Eduardo y yo. Quedaron
¡MARAVILLOSAS! Antes habíamos hecho pero nunca nos habían quedado tan
ricas. La receta del pino y masa son de Pilar.
Ajíes dulces Puertorriqueños. La primera vez que los compramos fue para
hacer un ceviche y no picaron nada. Luego entendimos que no eran ajíes
que picaran sino más bien una especie de pimientos.
Foto mientras hacia tramites por teléfono: Súper bronceado boricua +
picadas de mosquitos + zapatillas ultra cómodas.
Libro que estoy leyendo. Es una edición especial conmemorativa de la
Real Academia Española para los 40 años desde que Gabriel García Márquez
lanzó su más famosa obra. Este libro se lo regalé a Eduardo para un
cumpleaños muchos años atrás cuando era estudiante y ni pensaba en que
alguna vez nos casaríamos y viviría lejos de Chile.
Y eso por hoy. Espero poder escribir más luego del cambio de casa, por
lo menos no he dejado de pasar a los blogs amigos!
Semana 37 del año ya se ha ido. Cuando me di cuenta del número casi me
caí de la silla y es que falta muy poco ya para fin de año. Por acá el
calor durante el día es el de siempre, pero ya en la noche notas una
leve baja en la temperatura. Digo leve porque lo único que provoca es
querer taparte los pies con las sábanas, pero algo es algo. La semana
que pasó transcurrió en forma más normal y haciendo visitas y tramites
de cambio de casa. Si señoras y señores me cambio de casa a fin de mes.
No es un gran cambio ni nada, es cerca del actual apartamento (uuh ya me
acostumbré a esa palabra) y sinceramente lo que más tengo que cargar es
ropa, porque muebles tengo lo mínimo.
Lo otro importante es que operaron a Atia. La esterilizaron el día
miércoles, la pobre ese día se las durmió todas, pero ya el jueves
andaba de lo más normal. Eso si le tuvimos que comprar un collar para
que no se lamiera la herida y no se sacara los puntos, así la pobre anda
de lampara por la vida (ya la verán).
Y mejor los dejo con imágenes.
Foto intima regaloneando con Atia
Atia con el collar de la vergüenza.
Atia fantasmagórica que me quiere quitar la pelota.
Vista desde el depto. La foto no es muy buena pero me gusta ya que si se
fijan al lado de esos preciosos colores del atardecer hay una media ni
que tormenta, los truenos se sentían fuertísimos pero siempre hubo sol.
Una linda postal común en Puero Rico.
Preparando pasta fresca.
Maquina que nos trajimos de Santiago.
Paparazzeando: La ciencia ha llegado a mi casa!
Condado
Lentes de sol que no dan más de lo playeros, me los traje de Chile.
Atia a punto de dormirse luego de una tarde en la playa.
Ahora me voy que ando estoy a full leyendo Cien años de soledad (desde
una mirada más adulta ya que la leí en el colegio) y la trilogía 50
sombras, de la cual puedo decir que no me dejará mucho en el aspecto
académico pero es bastante entretenida y en contra de lo que se ha
escrito no la encontré para nada escandalosa, para nada.
Saludos y feliz 18 para todos mis compatriotas y a los que sienten a mi
querido Chile su hogar!
Comienzo por contarles que ya me siento bien, 100% recuperada de ese
maldito y ya olvidado rotavirus. Ya he podido ir a la playa, tener
nuevamente ese bronceado caribeño que se me había borrado en Chile y que
ya he podido disfrutar de los ricos 35 grados que hacen promedio todos
los días por acá en estas fechas. También que ya estoy toda picada como
es costumbre. Ya estoy en casa!!!
Hace varias semanas ronda por los blogs cierto premio que sinceramente
ya ni me acuerdo la primera vez que lo vi ni donde. Tampoco quien me lo
dio o si me lo dieron. y como soy tan re floja para ir atrás y/o hacer
un trabajo mental para recordar me colgaré- perdón lo patuda- de las
preguntas de la linda Andre, y también contaré algunas cositas sobre mi.
1.- Soy profe de Historia y Geografía. Titulada hace un par de años. En
Chile trabaje haciendo clases en colegios y clases particulares. Hoy
en día tan solo particulares.
2.- Soy un GPS ambulante. Aunque no lo crean soy capaz de ubicarme y no
perderme en lugares que no conozco (lugares épicos fueron New York y
Chillan). Eduardo se queda asombrado de mi don -bueno él es bien pero
bien perdido en general- nunca me pierdo, siempre se dónde está el
norte. Es cosa de mirar un rato un mapa y ya se como moverme para
siempre en ese lugar. Es tanto mi don que he pensado en ser rutera,
dejando la molestia aparte sería perfecta!
3.- Soy súper pero recontra picada. Se me ha pasado un poco con los años
pero creo que todos mis amigos de la infancia me recuerdan cuando me
picaba y me entraba a la casa con la pelota o los juguetes y los dejaba a
todos pagando (digo me entraba porque en ese tiempo todos jugábamos en
la calle), al rato salía nuevamente y prometía ante mis amigos que no me
picaría de nuevo ni me iría enojada. Pero claro al rato sucedía lo
mismo y era un cuento de nunca acabar. En mi defensa debo decir que era
porque no seguían las reglas de los juegos. Y eso me sigue picando hoy
en día que me cambien las reglas.
4.- Viví un tiempo en Chicago. El porqué aunque suene cliché ha sido por
amor. Mi Eduardo es científico y trabajó por esos lados. Hoy mismo
estoy en Puerto Rico por él.
5.- Me pongo roja con facilidad. No soy vergonzosa -para nada-, no soy
tímida, soy profe por lo tanto estoy acostumbrada a hablar frente a
mucha gente, hablo fuerte y en general no hay grandes cosas que me
intimidan. Pero toda la vida he sufrido con ponerme colorada en los
momentos más estúpidos y ridículos. Por ejemplo hacer un brindis, cuando
me tiran un piropo habiendo mucha gente. Sinceramente nunca me lo he
explicado muy bien. Lo bueno es que lo he podido ir manejando con el
tiempo.
6.- Toda la vida me han molestado por como me visto. En la Universidad
me decían que era anacrónica, muchas veces me tiraron tallas pesadas en
torno a ciertas prendas, todas me las tomé con humor ya que para mi era
al contrario, lo encontraba casi un honor que mi ropa por lo menos no
pasara desapercibida.
7.- Soy súper positiva, pero no de esas personas que llegan a aburrir
porque todo lo encuentran lindo y perfecto. Soy positiva porque gracias a
mi madre he aprendido que no todo es tan terrible en la vida y que
siempre pero siempre habrá una solución, puede ser una que no nos guste
ni acomode pero siempre se podrá salir de lo que sea, es cosa de
proponérselo.
8.- Amo con locura a los perros, es tanto que creo soy media loquita con
ellos, lo asumo. Pero en mi defensa no los humanizo, los trato como
perros, trato de ser lo más responsable en su tenencia y no me cabe en
la cabeza como alguien pueda abandonar así como así a un animal que fue
su mascota, pensar en eso se me parte el corazón.
9.-No se andar en bici. Muchos años me sentí mal por eso, me daba
vergüenza. Claro está que sigo recibiendo bromas-muchas de ellas muy
mala onda- pero ya me da lo mismo, es por eso que lo cuento libremente.
Algún día aprenderé, si ya he aprendido a esquiar y a manejar como no
podré con una bicicleta. Esta demás decir que me siento la raj@ por
saber esquiar y es que pucha que es difícil y además adrenalinico, no
cualquiera puede hacerlo jajaja.
10.- No tuve computador hasta que entré a la Universidad, osea tuve uno
muy chica como a los 10 años pero un día se quemó y mi papá nos culpó a
mi hermana y a mi por ello. Nos castigó y dijo que no nos compraría otro
para que aprendiéramos a cuidar las cosas. Durante la media tuve que
hacer las tareas y trabajos en el colegio y me perdí toda la moda chat.
Cuando entré a la Universidad mi papá ya no se pudo hacer el loco y
compró uno. Años más tarde descubrimos que mi papá en un súper arreglo
que hizo había puesto los cables cruzados y por eso se había quemado el
compu e incluso una tele, menos mal no se quemó la casa. Hoy en día al
reprocharle que nos tuvo sin compu toda la adolescencia mi padre solo se
ríe.
11.- Soy lectora veloz, pero no de esas que aprendieron método ni formas
de hacerlo, sino que cuando chica (desde los 7 años más o menos) leía
mucho, pero mucho, más menos unos 5 libros mensuales. Entonces hoy en
día me puedo leer fácil un libro corto en una mañana. Pero ultimamente
me he puesto floja para leer, leí tanto en la Universidad que se me
agotaron las ganas, de a poco he ido retomando los libros, por lo menos
no perdí la rapidez.. Lo malo es que cuando me pongo en modo lectura se
me olvida el mundo y no hago nada más.
Y las preguntas de la Andre son (nuevamente perdón por lo patuda) y debo confesar que me encantá responder estas preguntas, me siento como estrella de cine jajajaja.
¿Cuál es tu banda favorita?
Me asumo loca por Madonna y por Morrissey.
¿Si tuvieras que elegir un personaje histórico(musical, etc.) cuál
serías?
Chileno sería Balmaceda y mundial Michel Foucault (Edito esta respuesta: NO me gustaría ser ellos, ya que ambos terminaron mal, sino que me gustan ellos como personajes y su pensamiento)
¿Qué color prefieres?
Siempre el verde
¿ Aceitunas o papas fritas?
Ayy con el dolor de mi alma, papas fritas.
¿Qué tiene que tener un chico para que te guste?
Inteligencia
¿Qué te mata las pasiones?
La falta de empatía
¿Si te ganaras el kino que sería lo primero que comprarías?
Zapatos
jajajajaja
¿ y a dónde viajarias?
Estambul
¿Qué película es tu favorita?
Difícil, pero por todas las veces que la
he visto sería Mujeres al borde de un ataque de nervios (loca de patio
por Almodóvar)
¿Tacos o zapatillas?
Me encantaría que mi respuesta fuera tacos pero es
zapatillas.
Y por último como yo soy floja con estás cosas las preguntas que les
dejo no son mías, sino que las tomé prestadas de las maravillosas
preguntas del día de Mico el micofono.
Escribo ya desde mi hogar en PR. Son las tres de la tarde y hacen 32
lindos grados. Atia está a mi lado flojeando-regaloneando. Y les cuento
mi semana
Mi semana número 36 se redujo a : ROTAVIRUS!!! si
señores y señoras me traje de Chile un lindo rotavirus. El día que viaje
estaba todo bien y perfecto, me fue a dejar mi linda familia al
aeropuerto, Atia estaba de lo más bien, no se atrasó el vuelo y me fui
sentada solita en una corrida de tres (siempre tengo esa suerte). Como
habrá sido mi buena suerte que el avión aún no despegaba y yo ya estaba
durmiendo echada en los tres asientos ovbio. Desperté una hora antes de
llegar a Panamá justo al momento del desayuno. Iba feliz mirando por la
ventana el lindo mar Caribe, el canal y la ciudad de Panamá
cuando me comencé a sentir "extraña" por decir de algún modo. No le hice
caso a mi malestar y me bajé feliz a mi escala en Panamá pensando que
me quedaba super poco para llegar a San Juan (menos de tres horas el
vuelo de Panamá- San Juan), pero no, no me quedaba poco.
Me subí al avión que me llevaría a los brazos de mi Eduardo y
comenzó mi pesadilla. Ganas de vomitar, tersianas, frio extremo, fiebre,
etc. Como será que ni comí (y eso es mucho), el vuelo se me hizo
eterno, no quise decir mucho porque ya me veía en cuarentena en el
departamento de Estado gringo (si, si se que le puse mucho). Apenas pedí
una mantita y me vine como pude tratando de que se me hiciera lo menos
incomodo posible. Por fin llegue a suelo boricua pero me quedaba pasar
por policía, buscar las maletas y a mi Atia (todo eso con un dolor de
cuerpo espantoso) e ir a aduana. Menos mal que los puertorriqueños son
la gente mas amorosa del planeta y me ayudaron e incluso le hacían
cariño a Atia que estaba de lo más feliz por llegar a su país (no
olvidar que Atia es "criolla"). Después de pasearme con maletas y perro
por el aeropuerto vislumbro a lo lejos a mi querido Eduardo que estaba
feliz por nuestra llegada. Lo vi y lo único que pude decir fue "me
siento mal, me quiero iiir" (no se cumplió mi anhelado deseo
hollywoodense de correr a sus brazos con música de fondo)
Llegue a casa sintiéndome aún peor que en el avión, me bañé, me acosté,
balbuceé alguna que otra palabra debido a la fiebre y me dormí. Recién
el jueves me sentí mejor.
Como verán mi elegante semana no es digna de ser mostrada en imágenes.
Le pondré empeño en que esta sea mejor!
Un gran abrazo a los-las que pasan por aquí. Entenderé a la que luego de
leer esta entrada poco chic no pase más jajaja.
Escribo esta entrada casi a punto de salir de la casa de mis padres
camino al aeropuerto. En menos de 24 horas estaré nuevamente en Puerto
Rico, en mi hogar. Dejo el país con gusto a poco y con sentimientos
encontrados. Estuve dos meses regaloneando y disfrutando a mi familia y
amigos. Chile es mi país y me siento infinitamente cómoda aquí con mi
familia y amigos pero no saben como extraño mi hogar en Puerto Rico y a
mi Eduardo.
Quiero darles a todas y todos infinitas gracias. Gracias por hacerme
sentir en casa. Gracias por acompañarme en estas vacaciones. Gracias
por acomodar sus horarios y planes para estar conmigo. Gracias por
alegrarse por tan solo verme. Gracias por hacerme sentir que no importa
ni la distancia ni el tiempo. Gracias por hacerme reír. Gracias por
estar conmigo.
Y mejor nos vamos con las últimas imágenes de mi estadía en mi
querido Chilito.
La que se ríe en la fila jajaja
Bravissimo. Siempre el mismo pedido: Helado de frambuesa y piña con un
panqueque de berries.
Acosando a Atia con pinche de flor.
Hermoso sobre regalo de mi madre querida
Escondida tras el anillote
Nueva mezcla que me encantó: Amarillo más rayas blanco/azul
Camarita amiga que me prestó mi linda hermana ya que Eduardo se llevó la
GRAN cámara.
Regaloneo de mi hermana: Postre Tres Leches y Tiramisu (para los que se
estén preguntando no me comí los dos)
Bueno queridas y queridos, me despido tanto de ustedes como de tierras
chilenas. Nuevamente gracias a todos los que pasaron por aquí a pesar de
que no actualicé mucho.
Adiós y nos vemos, leemos y escribimos desde tierras boricuas.